El desarrollo organizativo del PCPE, y el incremento de su capacidad de intervención política en la lucha de clases, nos permite presentarnos a estas elecciones con la voluntad manifiesta de recoger la mayor parte del voto comunista y revolucionario de clase trabajadora, la juventud y los sectores populares de los pueblos y naciones de España. Trabajamos para poner fin a la endiablada dinámica promovida por las fuerzas del sistema, por la cual, aquellas personas que dicen ser comunistas, entregan una y otra vez, su voto y capital político e ideológico a distintas organizaciones reformistas, demostrando una total falta de confianza en la propuesta política de superación de la sociedad de clases.
Nunca el reformismo defenderá los intereses de la clase obrera; históricamente fue así y en la actualidad aún lo es más. A los pocos meses del triunfo electoral del PSOE, en el año 1982, quedó claro la política antiobrera y antipopular que desarrollaría: desmantelamiento industrial, privatizaciones, reformas laborales…, junto a una política al servicio de la fracción más activa de la burguesía, para consolidar nuestra integración en la Europa del capital y la OTAN. El capital, con su apoyo financiero y mediático los había aupado al poder, y ahora, pagaban los favores debidos. Con los años esta situación se ha ido agravando, el desarrollo de las políticas neoliberales y el debilitamiento del movimiento obrero organizado y combativo, han acelerado la integración orgánica del reformismo en el sistema del Poder (consejos de administración, cátedras, asesores…) y lo convierten, con el voluntarista voto popular, en un legítimo y eficaz gestor del capitalismo.
Votar al PSOE no es votar a la izquierda votar a los que, como IU, utilizan sus apoyos electorales para apuntalar estas políticas burguesas, tampoco lo es. En estos cuatro años el Gobierno de Zapatero ha desarrollado desde la sumisión al imperialismo de la UE y los EEUU-, una política para impulsar los intereses de la oligarquía financiera y especulativa. Las medidas sociales que utiliza para legitimarse, se diseñan para favorecer el proceso de acumulación capitalista mediante la privatización.
Es necesario confrontar en todos los frentes con estas políticas. Desde la movilización popular, pero también con el voto. Todas las personas que luchamos por una sociedad de personas libres e iguales, podemos desenmascarar la falsa paz social en la que vivimos. La agresividad de la burguesía contra la clase trabajadora, la juventud y los sectores populares no permite seguir hablando de paz social. Se nos agrede y es necesario responder. Votar comunista, votar al PCPE es importante para invertir la tendencia que nos sitúa, desde hace décadas, perdiendo derechos. Continuar votando al reformismo (PSOE, IU) es renunciar a un futuro mejor y a la posibilidad de cambiar la actual situación. El voto comunista para el PCPE.
